El partido de regreso de la Gran Final de la Copa Betplay, en la que Atlético Nacional se coronó campeón al ganarle en el clásico a Independiente Medellín. Acabó con disturbios fuertes entre aficionados tanto de la agrupación verdolaga como de la alineación poderosa, influyó en la celebración que solo se dio durante el recorrido una hora después y con el estadio prácticamente vacío de lo que el alcalde Federico Gutiérrez se insinuó ante lo ocurrido dejando claro que habrá consecuencias.

Para quienes protagonizaron estos lamentables hechos interviniendo con que se investigará, ya que es un choque que disputan una gran parte de los aficionados. En el que se enfrentan a un grupo de desadaptados que solo buscan generar violencia, porque los colores no se pueden utilizar como excusas para quienes fueron a desatar explosiones de agresividad. Generando miedo para ser investigados por las autoridades para impedir que algunos dañen el patrimonio de la ciudad.

Según lo lamentó Gutiérrez a través de sus canales digitales, porque no es la primera ocasión en la que ocurren esta clase de actos. Ya que también se dio en la etapa final de 2024 en el estadio Pascual Guerrero, que amargó el espectáculo deportivo ya que fue multado por la Dimayor y las autoridades locales obligando a los Diablos Rojos a jugar a puerta cerrada. Y le impidió recoger la taquilla durante seis fechas por parte del ente deportivo porque la alcaldía lo castigó con cinco.

No tiene comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *