Quienes estaban dudando si era buena la idea de cambiar Inglaterra por Alemania, siendo la liga premier la mejor del mundo para intentar figurar en la Bundesliga necesitan tomarse un buen tiempo para hablar de negocios. Porque a nivel deportivo el cambio que hiso el colombiano Luis Fernando Díaz al ser transferido de Liverpool a Bayern Múnich era equivalente para mejorar ya que llegaría a un equipo que le ofrecería todas las ocasiones para ampliar su palmarés.
Aunque es posible que el nivel de competencia baje un poco, pero no deja de ser una de las cinco más importantes del planeta fútbol en Europa y además ofrece una ocasión para disputar con protagonismo la Liga de Campeones.Una ilusión que a la luz de los últimos resultados en este arranque de la temporada no luce tan clara para Liverpool, porque al final se confirmó por una cuestión económica siendo un hecho que el caballero guajiro tenía una condición baja a nivel de salario en Inglaterra.
En donde estaba por debajo de los quince jugadores más caros, compartiendo la casilla con jugadores que ni siquiera eran titulares. Porque de los Veintidós millones de euros que se ganaba anualmente lo comparte con otros jugadores como el holandés Virgil Van Djik y el egipcio Mohamed Salah, quienes ampliaron sus contratos y de los cerca de Dieciocho con los que entró el sueco Alexander Isak a quien adquirieron por cerca de Ciento Cincuenta millones.
Aunque en cifras que no son oficiales, Díaz estaba a lo lejos ya que ganaba Tres millones de euros por temporada según datos que no han sido verificados en Inglaterra por lo que terminó buscando destino. Y en el mejor de los casos le iban a doblar el salario para llegar a cerca de Seis millones, con lo que esperaban que fuera suficiente. Por lo que llegó Bayern Múnich para ofertarle una transferencia de Setenta y Cinco millones de euros con bonificaciones y Catorce por temporada.
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