Acomodarse en un nuevo equipo es una carrera contra el tiempo para una estrella mundial. Con la expectativa de que todo lo malo se magnifica y lo bueno se convierte en obligatorio, en la realidad por la que camina Liverpool que se gastó Quinientos Millones de euros en contrataciones durante el último mercado y aún no los convierte en resultados ó buen juego. Porque el movimiento de la nómina fue calculado en la moneda continental, y algunos aspectos más específicos.
Aunque en otros no tanto, a causa de que se fueron diez jugadores incluidos el colombiano Luis Fernando Díaz, el uruguayo Darwin Núñez, y Trent Alexander Arnold. Además de registrar la dolorosa muerte del portugués Diogo Jota en el caso del guajiro fue transferido a Bayern Múnich de Alemania, a pesar de que la intención siempre fue la de que se quedara, pero ya tenía decidido cambiar de aires. Aterrizando en tierras bávaras y a la hora del balance uno de los referentes habló acerca del tema.
El holandés Virgil Van Dijk no se atasca en engaños. Enfatizando que han perdido mucha calidad porque era fundamental durante los últimos años. En entrevista enterrada a la prensa inglesa interrogó que las contrataciones son buenas pero que no son realmente nuevas caras, porque básicamente reemplazan a los que se fueron y que les llevará tiempo regresar para encontrar el equilibrio que tenían. Mientras que varios expertos esperan estipulando que una de las ausencias más notables es la de Díaz.
Por el compromiso y el sacrificio que mostraba integrando a los tres referentes en ataque, como una forma de presionar al adversario y que por ahora no la ofrece ninguno de los jugadores que ha llegado como contratación. Aunque arrancaron con buenos resultados, pero ahora lo acompañan tres caídas en línea, y no ofrecen tampoco un estilo de juego que parezca sólida ó confiable a pesar de haber llamado a varios jugadores de alto costo como el francés Hugo Ekitike, el sueco Alexander Isak, y el alemán Florian Writz.
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